miércoles, octubre 04, 2017

Perjuicios para el Nacionalismo Andaluz

Con todo lo que se está formando, ahora, el único nacionalismo con prestigio va a ser el de siempre. Ha sido una oportunidad perdida, porque allí donde se supone que hay una sociedad más urbana, más abierta, más tolerante, todo lo que hemos visto es que se está cociendo la codicia, el egoísmo y la xenofobia más clásica. Para mí este efecto refleja la profunda influencia del Franquismo, que extiende sus tentáculos hasta el inconsciente del más radical de los radicales de la izquierda catalana. Esa intransigencia, esa arrogancia y superioridad, tiene la marca "Franco". Esa ideología es poderosa y atrae a los jóvenes hacia un reverso tenebroso de odio y calamitosa tendencia a castigar a todo lo que no es consistente con sus ideas. No existe la autocrítica y la disidencia se castiga con la persecución como si de la Inquisición se tratara. La tolerancia y la empatía están ausentes en el programa político de los nacionalistas catalanes, porque al final, todo lo que quieren es poder y dinero. Es una gran lección para los nacionalismos de izquierda. ¿Existe esperanza para una izquierda viable o es todo un sueño imposible? Mi experiencia acumulada me dice que la mayoría de la gente que cree ser de izquierda lo son porque no pueden ser de derechas, solo les interesa el poder, la fama y el dinero, igual que a los de las élites. De modo que, ¿qué esperanza puede quedar para formar una izquierda nacionalista andaluza?

martes, octubre 03, 2017

Un Futuro Incierto

Con las dinámicas existentes dentro del territorio conocido como Andalucía del Norte, es dificil augurar un futuro estable para el crecimiento de la cultura y la identidad Andaluza. Resentimiento, racismo, falta de respeto y comprensión dominan las relaciones entre el Estado y la Periferia. Un Andalucismo escasamente desarrollado hace que nosotros no seamos capaces de compensar esta lucha que se establece entre este monstruo bicéfalo que puede acabar engullendo a todo el mundo. La paz social, el empleo, la ciudadanía, los valores y el compromiso por el desarrollo se están quedando muy lejos de la agenda del gobierno andaluz y de cualquier otro tipo de gobierno ibérico. Lo que importa son los votos y la construcción de la identidad por oposición o contraposición a aquellos que hemos demonizado. Andalucía se ve en la tentación de inclinarse por una de las dos cabezas del monstruo, pero es realmente esa la actitud a desarrollar? El monstruo es el problema. Hay que hacer que la sociedad iberica se haga más tolerante, respetuosa y comprensiva con sus propios pueblos y formas de vida. Pero todo el mundo tiene que dar un paso adelante y comprometerse. En el caso de Andalucía, eso ni siquiera es suficiente. Hay que ahondar en nuestra identidad y hacerla más palpable, sino el monstruo nos engullirá y pasaremos a formar parte de él, como un tejido indiferenciado, una musculatura lisa, invisible y sin relevancia.