-Y bien querido amigo, cuéntame, ¿cómo te va en el nuevo trabajo?
-Me va bien, pero vamos esto parece una charcutería más que una clínica...-dijo el psicólogo-
-Vaya, eso suena algo raro, ¿y a qué se debe?
-Los pacientes vienen a la consulta como si fueran clientes, y te pueden abordar así por ejemplo; -¿me da un cuarto de rivotril, y cien gramos de terapia cognitiva?-
-jajaja, eso es broma.
-De broma nada, te lo digo en serio.
-Pues como te he cogido así a bote pronto, ponme una bolsita de zopiclona que ando con insomnio.
-Vete al carajo.
3 comentarios:
Un aparatito con el que se apunta a diez centímetros de la frente del o la paciente, como los de medir la temperatura corporal sin la fiabilidad de una delgada columna de mercurio. Se enciende una lucecita verde y la terapeuta en menos de tienta segundos, con la determinación de una cajera de supermercado que de forma automática apunta hacia un código de barras, dice: Ansiedad, libro de yoga y sertralina. Y por la banda magnética siguen circulando en fila india los clientes.
-Quiere copia?
Hay que patentarlo!! eres una genia!!!
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